De La SN a La DISIP

De La SN a La DISIP
Por: José Manuel González S.

Recuerdo las historias de mi padre (85) acerca de la SN y de lo terrible que era para alguien ser tildado de "Adeco" —que después del '58 sería motivo de gran orgullo y TODO VENEZOLANO QUE SE RESPETASE ERA ADECO O COPEYANO—, y recuerdo historias de cierto personaje de apellido Estrada (...) mientras escucho las noticias sobre el Gobernador de Mérida y también sobre los americanos de la firma "Election Systems" amenazados, vejados y humillados (24/5/2000) por la SN, perdón, la DISIP. Luego, en la noche, escucho a Fidelito II recitar la misma perolata, montado en una tarima en la Av. Bolívar, mientras es observado por una Marisabel boquiabierta —con tan falsa admiración que ni ella misma se lo creía—, y me asalta la zozobra. (Si la consorte del presidente, en un supuesto negado, tuviese cerebro y ascendencia sobre "el soberano", creo que en algún discurso multitudinario la escucharíamos dirigirse al pueblo, cual Evita, diciendo: "Mis Descabezados...", por aquella frase célebre de la Perón cuando se dirigía a sus "Descamisados". )
Amigos, ¡Esto no puede estar pasando!
La historia se repite: El 30 de Noviembre de 1952 fue URD quien ganó las elecciones para la Asamblea Constituyente, y a escasos dos días, el 2 de Diciembre, Marcos Pérez Jiménez "usurpó" en el poder. Sí, el mismo M.P. Jiménez que había sido aliado de AD para derrocar a Medina Angarita (1945). ¡Qué tal!
Lo más interesante de ese proceso de golpes y contra-golpes (encuentro yo) es que estaba liderado por gente muy joven. Gente que tenía menos de treinta años de edad, inexperta, por supuesto, pero con unos proyectos medio claros. Será que no había telenovelas en esa época, y los estudiantes tenían más tiempo para dedicárselo a la lectura. Me refiero a los estudiantes porque esos líderes que sembraron la semilla de nuestra democracia a través de la creación de los partidos políticos, que hoy todos odian, comenzaron su proyecto siendo unos adolescentes. Algunos en el exilio, cuando Gómez, pero todos con deseos de participar en la vida política del país.
La mayoría de los historiadores coincide al responsabilizar a los sucesos del 18 de octubre de 1945 como el aborto de lo que pudo haber sido la democracia venezolana. Si bien es cierto que López Contreras y Medina Angarita prometían una transición pacífica hacia la democracia, también lo es que los unos habían sido ministros de Guerra y Marina de los otros (incluyendo la relación López Contreras-Gómez) y por lo tanto, el afán de protagonismo la juventud impetuosa, aunado a la sed insaciable de poder de ciertos militares, encontraría en esa peculiaridad los elementos para justificar el rompimiento violento de lo que pudo ser un buen comienzo para la democracia Venezolana.
Quisiera que la historia no se repitiese, pero estamos sentenciados a ello...por eso de que "el pueblo que olvida su historia está condenado a repetirla". Sólo espero que si la condena ya tiene el ejecútese —firmado por todos los venezolanos— , esto sirva para despertar de tan largo sueño a la juventud que día a día calienta pupitres mientras se inventa "Pokemones" voladores.
Razón tenía Bolívar en el Manifiesto de Cartagena (15/12/1812), y a raíz del fin de la Primera República, cuando se refiere a Venezuela como "La República Aérea".